12 De esta forma hablad, y de esta manera haced, como quienes deben ser juzgados por la ley de la independencia. 13 Pues juicio sin clemencia va a ser dictado sobre el que no hace clemencia; y la clemencia triunfa sobre el juicio. 14 Hermanos míos, ¿de qué le sirve a alguien decir que tiene fe y no entrenar?
En nuestra iglesia leemos la Biblia juntos. Últimamente, mientras que leía Mateo 23:3, me llamó la atención una conexión que jamás antes había visto.
El Señor se encontraba advirtiendo a los acólitos sobre los fariseos. Les afirma que observen y hagan lo que dicen los fariseos, y después añade: «Pero no hagáis de conformidad con sus proyectos, pues dicen y no hacen». Dicen y no.
CAPÍTULO 2, 13-17
Por el hecho de que el que no tuvo clemencia va a tener juicio sin clemencia; pero la clemencia semeja superior al juicio. ¿De qué sirve, hermanos míos, si alguien afirma: «Tengo fe» si no posee proyectos? ¿Quizás consigas socorrer tu fe? Si un hermano o una hermana está desvisto y sin el sustento períodico, y alguno de nosotros le afirma: «Ve en paz, caliéntate y cómete», pero no le das lo preciso para el cuerpo, ¿de qué sirve? De esta forma asimismo la fe, si no posee proyectos, de todos modos está fallecida.
Y por contra, alguien puede decir: “¿Tienes fe?; Bueno, tengo trabajos. Pruébame tu fe sin proyectos y yo te probaré mi fe por proyectos. ¿Piensas que hay un solo Dios? Hace bien. Los diablos asimismo creen y tremen. ¿Tienes ganas de saber, necio, que la fe sin proyectos es estéril? ¿No alcanzó Abraham nuestro padre la justificación por las proyectos en el momento en que ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? = ¿Ves de qué forma la fe cooperó con sus proyectos, y por las proyectos, la fe alcanzó su perfección?
«Ley» puede referirse a un solo mandamiento
No es siempre cierto que «Ley» se refiera de forma exclusiva al grupo de «Leyes Mosaico», o «Leyes Eternas», pero puede referirse a solo una ley, por servirnos de un ejemplo:
«¿Qué es la Ley Real?»
Las proyectos prosiguen a la fe
Es esencial indicar que las proyectos prosiguen a la fe (debemos accionar con mucha fe). Las proyectos son una aceptable herramienta para hacer un diagnostico o medir dónde se encuentra nuestra verídica fe.
Nuestras buenas proyectos no tienen relación con nuestra salvación. Pablo aclara en Efesios 2 que separados de Cristo nos encontramos fallecidos en el pecado (Efesios 2:4-9); por ende, somos inútiles de efectuar buenas proyectos. No obstante, tras nuestra salvación, tenemos la posibilidad de efectuar «buenas proyectos que Dios preparó por adelantado» (Efesios 2:diez). Las proyectos son un fruto de nuestra salvación, no un medio para ganarla.